EL CAMINO DE SANTIAGO

Dar a conocer EL CAMINO DE SANTIAGO, compartir experiencias, consejos, preparación, recomendaciones, noticias, eventos, curiosidades, leyendas y cualquier información en relación al camino.

domingo, 27 de agosto de 2023

Dia 21 CAMINO FRANCES VIRTUAL, 22/04/2020, Miércoles 22 de Abril 2020. León – Hospital de Órbigo.

 Dia 21 CAMINO FRANCES VIRTUAL, 22/04/2020, Miércoles 22 de Abril 2020. León – Hospital de Órbigo.

Me despierto, son las 6 y 15 am, reviso el móvil y la temperatura hoy no varía con la de ayer, cielo azul, mínima de 9ºC con máxima de 16ºC. Hoy el recorrido es de 32,3 kilómetros y estimo realizarlo en 8:30 horas.
Me levanto, realizo el ritual del peregrino, me cuelgo la mochila, tomo el bordón y salgo del hotel, no sin antes sellar la credencial, son las 6 y 45 a.m., el viento me golpea la cara, hace frio, está empezando aclarar y tomo rumbo a Trobajo del Camino. Atravieso la Plaza Mayor, tomo la calle Mariano Domínguez hasta llegar a la Catedral de León, cruzo a la izquierda hacia la calle Ancha, paso frente al Palacio de los Guzmanes, la casa Botines, tomo la calle del Cid hasta llegar a la Plaza San Isidoro, tomo la calle Ramón y Cajal giro a la izquierda por la calle de Renueva, enlazo con la avenida de Suero de Quiñones hasta alcanzar el Parador de Turismo y Museo, antiguo Hospital de Peregrinos de San Marcos, cruzo el río Bernesga, continuo por la calle Quevedo, hasta la avenida Párroco Pablo Diez, cruzo la pasarela peatonal y llego a Trobajo del Camino.(3,9 km). Ya estoy mareado, tantos giros, pendiente del mapa de cómo salir, no equivocarme, menos extraviarme… Voy a seguir viendo las instrucciones, pero siguiendo mis instintos de orientación. Si sigo así este post va a ser una guía de cómo salir de León y eso no lo quiero. Sigo recto por la misma calle Párroco Pablo Diez y me encuentro la ermita en ladrillo y canto de Santiago Apóstol del s. XVIII, más adelante giro a la izquierda paso por la Plaza Sira San Pedro giro a la derecha, tomo la calle Camino de la Cruz, cruzo el polígono industrial y me encuentro de frente con la N-120, tomo el arcén hasta llegar al pueblo Virgen del Camino (7,5 km), el paisaje ha sido totalmente urbano y ya he caminado casi 2 horas.
Entro al pueblo, busco un sitio para desayunar, me detengo en una panadería, antes que nada, me tomo mi café expreso, pido un bocadillo de lomo, una manzana, un zumo de naranja, para tomar en el sitio y pido para llevar una empanada, una ración de queso, una cajita pequeña de té de manzanilla y una botella de agua. Mientras me estoy desayunando entro en conversación con una pareja de peregrinos que me preguntan cuál de las 2 vías voy a tomar, si la del Camino tradicional o la variante de Villar de Mazarife. Ellos están dudando cual será más interesante. El camarero nos dice que si seguimos el Camino tradicional vamos a estar siempre en paralelo con la N-120, en andadero sin poblaciones intermedias unos 8 kilómetros aproximadamente, mientras que la variante nos lleva por paisajes más naturales, descampados, entre campos de sembradíos. Me llama la atención la variante y les comento a los otros peregrinos que voy a ir por la variante, quiero alejarme del bullicio. Termino de desayunar, meto en la mochila los víveres que compré, me despido de ellos, salgo de la Panadería y me dirijo a la salida del pueblo. Cruzo la N-120 por el paso de peatones, paso frente al Santuario de la Virgen del Camino, https://es.wikipedia.org/.../Bas%C3%ADlica_de_la_Virgen... llego a una rotonda y allí encuentro la bifurcación. Giro a la izquierda, tomo un camino de tierra por la derecha. Cruzo por un puente la autovía de circunvalación LE-30, paso bajo la autopista A-66 y entro a la población de Fresno del Camino (9,5 km).
Continuo el camino por la misma carretera local, cruzo por arriba la vía del tren y llego a Oncina de la Valdoncina (11 km). Atravieso la población y me encuentro con una pista de tierra, empiezo a caminar entre campos de cereales y dejó atrás el paisaje urbano. La tranquilidad se empieza a sentir, ya oigo el trinar de los pájaros, disfruto el olor del campo. El camino es llano, observo chopos a las orillas de los riachuelos o canales de riego. Entro en el páramo, se empieza a sentir una brisa fría, pero agradable, comienzo a ascender levemente, observo a mi derecha un monte de robles, continuo por la pista de tierra, aunque hay partes que tienen gravilla, ya diviso a lo lejos un pueblo, una señal anuncia que es Chozas Abajo (16,9). Llego al pueblo, me encuentro con una cafetería/bar, entro, pido una taza de café con leche y un panecillo dulce, saco de la mochila la empanada y la fracción de queso, disfruto mi almuerzo y descanso unos 10 minutos. Salgo y atravieso el pueblo, a los pocos metros cruzo el arroyo del Monte, avanzo ahora por la carretera vecinal que conduce al pueblo de Villar de Mazarife, tengo bastante energía, no me siento cansado, el clima me favorece, empiezo a recordar… cuando hice mi primer camino, O´Cebreiro a Santiago, era una mañana muy fría del mes de marzo, empecé a caminar solo a las 7 y 30 am, ya había caminado unos 5 kilómetros y no conseguía nada abierto para tomarme un café y empecé a sentir un poco de miedo, ahora muchos años después me gusta caminar solo, ya no siento ese miedo, sin darme cuenta ya estoy en Villar de Mazarife (20,6 km), me encuentro a la entrada un monumento a los peregrinos, me detengo a hablar con un grupo de 3 peregrinos que están descansando, me comentan que ellos van a seguir hasta Hospital de Órbigo. Son la 1:45 de la tarde, cambio otra vez de planes y decido seguir.
Atravieso el pueblo, continúo por la carretera local al lado de campos de cultivo, recorro unos 6 kilómetros y llego a la intersección de la carretera de Bustillo del Páramo a San Martin del Camino, cruzo y continúo por la carretera de tierra hasta la localidad de Villavante (29,8 km). Esta localidad es famosa por celebrar anualmente, cada primer domingo de agosto, un encuentro de Campaneros, que alberga a maestros campaneros llegados de todos los rincones de la península.
Recuerdo que en este pueblo existe una leyenda Romántica e interesante: ¨El origen de la presa despertó la imaginación de los leoneses, que idearon una leyenda sobre el posible origen de ésta. Alíatar era el hijo del alamín, máxima autoridad de la zona, de un pueblo Villaviciosa de la Ribera y se encargaba de dirigir una explotación aurífera en las riberas del río. Zaida, por su parte, era hija del alamín de un pueblo que finalmente en honor a su belleza fue llamado Villazaida (Villazala). Un día, Alíatar recorrió la vega del Órbigo y acabó llegando a Villazaida, donde quedó prendado de Zaida, creyendo encontrar a la mujer de sus sueños. Zaída se mostró reacia a corresponder este amor y tras varios viajes a Villazaida, Alíatar decidió declarar su amor al padre de la joven, que no estando seguro por el noble interés del amor de Alíatar, le impuso la condición de que cuando el agua discurriese por su puerta, Zaida correspondería su amor. Esta prueba era harto complicada, ya que Villazala está situada a dos kilómetros del cauce del río y se encuentra a una elevación superior al del nivel de las aguas. Alíatar regreso a su pueblo y pidió ayuda a su padre, que preguntó a varios agrimensores de la zona sobre la mejor manera de encarar el proyecto. El proyecto requirió de abundante mano de obra y de la buena fe de los pueblos de la zona, que deberían ceder tierras para el paso del canal, a cambio de regar las tierras libres gratis con las aguas de la presa cerrajera; algunos pueblos no quisieron ceder los terrenos gratuitamente y optaron por venderlos, esta circunstancia hizo que las tierras de estos pueblos, para ser regadas, tuviesen que pagar un canon.
Zaida, en principio reacia al amor de Alíatar, ya suspiraba por él al ver el empeño de este por lograr su amor y temía que el proyecto finalmente no llegase a buen término y que pudiese perderle para siempre. Por ello, Zaida se asomaba cada día por la ventana para ver si el agua ya discurría delante de su casa. Esto se repitió hasta que un día, cuando la desesperación era ya muy grande, vio pasar las aguas del río Órbigo por delante de su casa. Después de esto, el novio y la familia del novio vinieron acompañados de un gran cortejo, celebrándose las bodas entre Alíatar y Zaída con gran alegría de las gentes de la Ribera del Órbigo, que veían como grandes eriales se convertirían ahora en las mejores tierras de la zona¨.
Salgo del pueblo rumbo a Hospital de Órbigo, cruzo por arriba la vía del tren, giro a la izquierda cruzo por arriba la carretera CL-621 giro a la izquierda y tomo un camino de tierra, cruzo la nacional N-120 y sigo por la calle constitución hasta el centro de Puente de Órbigo. Cruzo el largo puente sobre las aguas del río Órbigo (El precioso puente medieval que cruza el río Órbigo, llamado el Paso Honroso, es el más largo de la ruta jacobea (310 metros) y uno de los más célebres, protagonista de la gesta del caballero Don Suero de Quiñones en el año 1434, el cual, para demostrar a su amada que su amor era sincero, desafiaba en lucha a todos los que se atrevieran a cruzarlo) y llego a Hospital de Órbigo (32,3 km).
Me dirijo al Albergue Parroquial Karl Leisner, me registro, sello la credencial, paso al dormitorio dejo la mochila y el bordón. Tomo una refrescante y tibia ducha, me alisto, hoy es día de colada, lavo la ropa y la pongo en el colgadero. Me reúno con otros peregrinos en el patio central, conversamos sobre la larga etapa, muchos de ellos tomaron el trazado original, nos intercambiamos opiniones y puedo decir que entre gustos y colores no han escrito los autores, o su versión en latín "De gustibus et coloribus non est disputandum" Cada uno decía que su ruta de hoy era la mejor.
Reviso la ropa, ya está seca, la llevo al dormitorio y la guardo en la mochila, ya pronto oscurecerá, camino hasta el puente Medieval a ver la puesta de sol, es todo un espectáculo.
No tengo mucha hambre, debo cenar algo, me dirijo al albergue, busco la manzana y voy a la cocina comedor, preparo una manzanilla caliente, como la manzana, me incorporo a la conversación de los peregrinos que tengo a mi lado, hablan sobre la fiesta Medioeval que celebran aquí todos los años, tomo nota, me despido de ellos, voy al dormitorio, me alisto para dormir y rápidamente me quedo dormido.
Total, caminé 20 km, en 5:00 horas. Acumulado Km. (27+17+27+22.5+22+28+31+21+23+24+27,5+20+20.5+23.5+18.8+25,2+30,6+19+20+32,3) = 479,3
Todas las reacciones:
Tú, Sónia Martins, Ulpiano Revilla Garcia y 48 personas más

No hay comentarios:

Publicar un comentario